Luis XIV nace en Saint-Germain en Laye-Francia el 5 de septiembre de 1638 y muere en el palacio de Versalles, Francia el 1 de septiembre de 1715. Durante su reinado, Francia no solamente consiguió ser la potencia con poder político y militar, sino que también consiguió el dominio cultural con grandes dramaturgos de la calidad de Moliere, Racine y Corneille, compositores musicales como el grande Lully, pintores como Rigaud y Le Brun y hasta arquitectos como Le Nôtre el cual diseño muchos de los jardines del palacio de Versalles.
Luis XIV fue el rey que impuso la monarquía absolutista en Francia. De ésta manera el Rey cierra el parlamento y concentra todo su poder en él mismo. Por aquellos tiempos ya Galileo Galilei había dicho aquello de “E pur si muove” (pero se mueve). Basado en esta teoría, Luis se hizo llamar “El Rey Sol” por aquello de que todo debe girar en torno a él, lo que demuestra el gran amor y la enorme egolatría que tenía este personaje. Cabe destacar que todos estos elementos lo que generan es servilismo al rey y mucha burocracia inútil, que debían escuchar todos los largos discursos del rey.
Es imposible pasar por alto la similitud de aquél reino absolutista con la realidad actual del país donde Chacumbele es adulado hasta más no poder, porque él también se cree el centro del universo, produciendo así una ineficacia de gobierno por sus extensos discursos, en lugar de estar haciendo el trabajo que le corresponde.
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