SPOILER WARNING: EL PRÓXIMO
ARTÍCULO LLEVA SPOILERS; SI NO HAS VISTO LAS PELÍCULA Y TIENES INTENCIONES DE
VERLAS, TE RECOMIENDO NO LEER ESTE ARTÍCULO.
El episodio VIII y 9na entrega de la Guerra de las Galaxias, El último Jedi, me dejó con un sabor agridulce en la boca. No es la mejor película de Star Wars pero tampoco la peor. En comparación con la última de J.J Abrahms que le precedió es mucho mejor. Se puede notar que el director y guionista han cambiado, Rian Johnson ha dejado su huella en la película. “Bellamente hecha” según George Lucas.
Originalmente,
cuando fue concebida, ya se tenía pensado un arco argumental de 9 episodios y
se decidió comenzar con el IV. A la llegada del episodio VI, es decir la
tercera película filmada, George Lucas decide cerrar la trilogía matando así a
Darth Vader y Darth Sidious (A.K.A: el emperador), y restaurando así la paz en
la Galaxia.
Ya acá
tenemos el primer problema de estas nuevas películas; para seguir el arco
argumental necesariamente necesitamos nuevos villanos Kylo Ren, (hijo de Han
Solo con Leia), y el más forzado de todos Snoke,
vil copia del anterior emperador.
La
séptima película presenta un sinsentido; si la república democrática volvió a
la Galaxia, ¿De donde salen estos fanáticos de la primera orden, y cómo es que
tienen un presupuesto para hacer una tercera estrella de la muerte? ¿Qué hace
la, anterior princesa, ahora generala Leia en una rebelión cuando se supone que
no hay nada a lo qué rebelarse? Y si Luke Skywalker es un Jedi, como queda
claro en el episodio VI, ¿Por qué no sintió cuando sus seres queridos estaban
en peligro? Al final The Force Awakens terminó siendo un copy/paste de A New
Hope.
En la VIII
se corrige el problema político de forma que la primera orden regresa al poder
y los héroes a la rebelión, pero como película vuelve a presentar problemas
argumentales. En principio es demasiado larga para lo que tiene que contar,
esto se debe a que quisieron hacer un sub-plot con Finn para buscarle pareja,
Rose, y sus “aventuras espaciales” lo que hacen es rellenar innecesariamente la
trama.
Tampoco
es verosímil que el conflicto de la alianza sea falta de gasolina, (ni que
fuese Venezuela) y que el “nuevo imperio” sea tan incompetente como para
planificar un ataque. No hay buenas razones para que eso sea un buen conflicto.
Con
respecto a la relación entre Luke y Rey, me parece que es lo mejor que tiene la
película. Creo que Mark Hamill descata en esta película a nivel actoral. Creo
que a Hamill deberían, por lo menos, nominarlo a mejor actor en esta película.
A mí personalmente me hubiese gustado ver más de este dúo. La aparición de
Yoda, aunque breve, me pareció significativa y demostrando una vez más que aún
desde el más allá, sigue siendo el Jedi más sabio de todos.
Personalmente
pienso que Rian Johnson ha logrado con Luke Skywalker lo que Christopher Nolan
no logró con Batman en su tercera película. El tercer acto del héroe. Esa
especie de ermitaño, depresivo y desilusionado del mundo que ya está muy mayor
para su trabajo de Jedi, hasta que ve en una nueva generación una esperanza de
que alguien pueda continuar su legado, recuperando así las ganas de vivir, su
fe en el mundo y en lo que él representa.
Creo
que se abusó de la comedia con las ardillas que rodean la isla de Luke,
personajes completamente innecesarios en la película. Sospecho que están allí
más que nada por una estrategia de marketing, como Jar-jar Binks o los Ewoks.
Me gustó que R2D2 y C3PO hayan estado bien acoplados a la trama, porque pienso
que perdieron fuerza en la VII y en Rogue One estuvieron prácticamente
ausentes.
El clímax
está muy bien logrado, desde la traición de Kylo Ren a Snoke hasta la despedida
de Luke, aunque me molestó que hayan querido repetir la batalla de Hoth del
episodio V el Imperio Contraataca y hubiese estado perfecto si Rose no hubiese
salvado a Finn en el último momento. ¡Es el mensaje incorrecto! Si el amor eros
se pone por encima del bien común, no hay una comprensión clara de lo que
significa una rebelión. Es en parte lo que trajo Anakin Skywalker al lado
oscuro. Finn iba a sacrificarse por el equipo para que pudieran escapar, iba a
ser una muerte dolorosa sí, especialmente para Rose, pero significativa para la
trama.
La
música sigue teniendo una preponderancia en las películas de Star Wars. John
Williams sigue excitándonos en los momentos que debe. La dirección de arte y el
manejo de cámaras también hicieron de esta película entretenida y emocionante.
A pesar de los pesares, pienso que Disney ha hecho lo mejor que ha podido para seguir
ofreciéndole al público entretenimiento.